Escasas horas para que digamos adiós a este año 2015. Os
confieso que me da pena abandonarlo, un año que recordare por muchos motivos y
del que me llevo experiencias y amistades maravillosas.
Si el 2014 se pudo considerar el año de sembrar, este 2015 es definitivamente el año de la recogida.
Comienza con los primeros pasos de un bebe literario, el primero, unos pasos que conforme van pasando los meses van siendo más firmes y seguros. Yo iba ganando seguridad como escritora y como persona. Fue en los inicios de ese nuevo año cuando conocí a una persona de la que sigo aprendiendo día a día, una persona que depositó su confianza en mí con los ojos cerrados y que me hizo creer que una segunda novela sería posible a su lado. Yolanda Barambio, una editora y una amiga que, durante todos estos meses, ha sabido poner los puntos donde tocaban y como si de un instrumento se tratara ir sacando de mis dedos una novela que estoy convencida os gustara. Junto a ella Toni al frente de olelibros.com…
Si el 2014 se pudo considerar el año de sembrar, este 2015 es definitivamente el año de la recogida.
Comienza con los primeros pasos de un bebe literario, el primero, unos pasos que conforme van pasando los meses van siendo más firmes y seguros. Yo iba ganando seguridad como escritora y como persona. Fue en los inicios de ese nuevo año cuando conocí a una persona de la que sigo aprendiendo día a día, una persona que depositó su confianza en mí con los ojos cerrados y que me hizo creer que una segunda novela sería posible a su lado. Yolanda Barambio, una editora y una amiga que, durante todos estos meses, ha sabido poner los puntos donde tocaban y como si de un instrumento se tratara ir sacando de mis dedos una novela que estoy convencida os gustara. Junto a ella Toni al frente de olelibros.com…